miércoles, 6 de mayo de 2020

La saga de los longevos






CALIFICACIÓN: 9/10

Una historia original, intrigante y muy entretenida, sobre una familia milenaria que por alguna alteración genética, no envejece. Me encantó.


Sinopsis:

¿Qué harías si tu jefe, un experto arqueólogo, te confesara que nació hace 10,300 años?
“La saga de los longevos” es un adictivo cóctel de arqueología y flashbacks históricos —prehistoria, celtas, escitas, la rebelión de Boudicca, la batalla de Kinsale, y una fascinante historia de amor escrita desde dos puntos de vista: la voz fresca de Adriana, una joven arqueóloga, y el tono pausado de Iago, un enigmático hombre que aparenta treinta y cinco años pese a haber nacido en la Prehistoria.

La premisa de La saga de los longevos es de las más atrapantes que me he encontrado. Me hizo decidirme a leerlo sin pensarlo dos veces. Y no me decepcionó.

La saga de los longevos es una novela autopublicada que se convirtió en bestseller, y llevó a su autora, Eva García Sáenz, a ser publicada por editoriales, e incluso, a llegar al cine, con su trilogía de La Ciudad Blanca convertida en películas (aunque hasta ahora sólo se ha realizado la cinta del primer libro).
Es una mezcla de géneros: Thriller científico, romance, aventuras, suspenso, ficción histórica y ficción contemporánea. 

La pareja protagónica son Adriana y Iago, quienes se conocen en el museo del que él es uno de los propietarios y ella llega como empleada. 
Todo el proceso para que ella se entere del gran secreto de Iago me encantó.
Los conflictos entre los miembros de la vieja familia se van revelando poco a poco, así como muchos misterios y secretos que también involucran a Adriana, y que mantienen la trama en una constante intriga.

Las locaciones y los elementos de historia de la novela son algunos de sus mayores atractivos, ya que provocan una lectura interactiva. Disfruté mucho buscando más información sobre los sitios arqueológicos que menciona la autora, las ciudades, las calles, hechos históricos... hasta las investigaciones sobre el envejecimiento, los telómeros y demás. 

Otro punto fuerte es el estilo narrativo de Eva García: bien trabajado, bonito y cuidado. Me atrapó desde el inicio.
Uno de los puntos débiles que encontré en la trama es que, para ser una novela centrada en el romance, le falta intensidad al mismo. Aunque la autora trata de pintarlo como fuerte y pasional, a mí me pareció algo plano. No sé si por el romance en sí, o por los personajes. 

El final tampoco me encantó, pero sí me dejó enganchada para leer la continuación. ¡Ese cliffhanger estuvo genial!

La segunda parte de esta trilogía es Los hijos de Adán. El tercer libro aún no se publica.

Frases favoritas:

Hay palabras como latigazos, que sorprenden, castigan y abren una brecha dolorosa; palabras que cambian un presente de manera irreversible. Palabras imposibles, palabras que no encajan, palabras que se quedan para siempre tatuadas en la memoria. 

Me miró durante unos segundos más de la cuenta, sopesando si era digna 
de una respuesta sincera.

Aquel era mi último intento de arrancármelo de la cabeza. Tal vez una idea absurda y contradictoria. La última bala en la recámara del olvido.

Con el paso de los milenios, la mayoría de las experiencias se quedan en la bruma del olvido, del hastío o de la indiferencia.





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